A estas alturas queda poca gente que no haya escuchado hablar de las bitcoins, que se admite como medio de pago en un montón de webs, que incluso se puede convertir en una suerte de moneda física, pero ¿sabemos realmente qué es el dinero?
A grandes rasgos el dinero debe cumplir tres funciones básicas:
1.- Ser la unidad de medida del valor de nuestro mercado contra el cual expresamos el valor económico de bienes y servicios.
Este debería ser constante, algo que no sucede en Bitcoin… y tampoco en casi todas las monedas de curso legal del planeta, sobre todo desde que el dólar y la libra abandonaron el «Patrón Oro» en 1971.
El valor del dinero es algo abstracto que los humanos concedemos a las cosas, sea un algoritmo seguro u oro lo que sustenta, se deben establecer los medios necesarios a gran escala para que su valor sea lo más estable posible y no esté a merced de los vaivenes de un puñado de webs donde se realiza la compra y venta de ese dinero.
En el caso de Bitcoin, Mt.Gox se jacta de manejar el 80% del mercado de Bitcoins mundial y los ataques a esta web influyen en el resto de mercados on-line, aunque ellos lo han achacado a un crecimiento desmesurado de usuarios en las últimas semanas tras el corralito bancario en Chipre… la sensación es que el 80% del mercado lo lleva una sola web que está en Japón, que carece de los medios necesarios para mitigar ataques y que tampoco dispone de los medios para dimensionar correctamente su servicio y evitar caídas de varias horas.
Tampoco las monedas de curso legal están libres de estos vaivenes como demostró George Soros hudiendo la Libra Esterlina en una mañana.
La diferencia es que él necesito vender 10.000 millones de libras (con un beneficio operativo de 1.000 millones de dólares), arrastrando a un montón de inversores a vender, y al Banco de Inglaterra a gastar 50.000 millones en parar el golpe lo máximo posible, lo que no evitó la devaluación de la Libra y su salida del SME.
En Bitcoin no hace falta tener ese poderío económico, ni mercados de derivados o pares de divisas como me decían en Twitter hace unos días:
@soydelbierzo @jpiera ¿Fácil de especular? No hay pares de divisas con bitcoin, no hay derivados. Anda no hables de lo que no sepas.
— Rober Morales (@robermorales) 11 avril 2013
Cualquiera con los suficientes conocimientos puede hacerse con una botnet y tumbar a Mt.Gox (aunque ahora esté tras CloudFlare) para hacer que la gente entre en pánico, venda y poder comprar barato tras haber vendido caro.
2.- Ser un medio de intercambio.
Si bien es cierto que podemos usar Bitcoins para comprar servicios y productos en una amplia variedad de webs, desde dominios, hosting anónimo, cambiarlo por tarjetas regalo de Amazon o productos de dudosa legalidad en webs de la red Tor como SilkRoad; no podemos usar estas en nuestra vida diaria ni puede sustituir a monedas de curso legal como el euro o el dólar (este es el patrón principal a la hora de establecer cuanto vale una Bitcoin).
En el momento de escribir esto existen en el mundo 11 millones de Bitcoins (el límite se alcanzará en 2140 con 21 millones que es el límite que tiene marcado el algoritmo de generación), frente a 1,18 billones de dólares en moneda (no he encontrado una fuente oficial y fiable de circulación de moneda en Euros).
Esto significa que cada Bitcoin debería valer más de 107.000 dólares para sustituir al dólar como moneda, habría que sumar el valor del total de euros en circulación para que pudiera sustituir a ambas.
Además de que para tener Bitcoins necesitas disponer de un dispositivo, ordenador, tablet, smartphone en el que mantener tu monedero digital o bien confiar en terceros que se encargasen de rellenar los Bitcoin físicos que enlazaba al principio, o que te cambiasen tu Bitcoin a moneda local.
Esto dejaría fuera de ese nuevo sistema monetario a todo aquel que no disponga de la tecnología necesaria.
¿Y que tienda en tu barrio puede permitirse cobrarte en una moneda que tardará en llegarle 1 hora a su cartera, tiempo en el cual puede perder gran parte de su valor?
3.- El dinero nos permite tener nuestra «riqueza» de forma líquida para la adquisición de bienes y servicios.
Este es el punto más flaco de Bitcoin, la volatilidad que ha mostrado en los últimos días nos demuestra que no es un valor en el que depositar nuestra confianza. ¿Te gustaría recibir tu sueldo en Bitcoins o firmarías una hipoteca en esta «moneda»?
Que no dudo que resulte muy atractivo lo de tener una moneda que no esté controlada por gobiernos, pero eso conlleva aceptar los riesgos que tiene su utilización, porque tampoco estás amparado por gobiernos a la hora de reclamar en caso de robo, estafa, etc.
Aun en los casos como los de las preferentes y la inacción del gobierno español protegiendo a los bancos, nos encontramos con que la justicia acaba dando la razón a los ahorradores que, sospecho no pensaron mucho antes de hacerlo, metieron su dinero en esta trampa.
Lo mismo que con las famosas hipotecas en yenes, que resultaban muy atractivas hasta que la moneda se depreció más de un 43% entre 2008 y 2012, aumentando su deuda con el banco un 57%… imaginad esto con Bitcoins, que se depreció un 400% en menos de 24 horas.
A esto hay que añadir los fallos de seguridad o de implementación en el algoritmo que maneja la cadena de Bitcoin, como el sucedido en 2010 que permitió inyectar 184.000 millones de Bitcoins en la cadena, problema solucionado en apenas 4 horas con un parche que eliminó esta transacción fraudulenta… no sé si sois conscientes de los problemas que esto representa si la red de Bitcoin se pone de acuerdo para eliminar cualquier otra transacción de la cadena como sucedió en este caso o hace poco más de un mes, cuando una actualización del software rompió la cadena en dos, teniendo que suspender 12h los depósitos, transacciones y originando una caída del 23% de su valor.
Más allá de estos problemas, de la solidez y seguridad de la cadena de Bitcoin, está la de los servicios que aparecen al calor del dinero fácil y ofrecen monederos on-line, entre otros, y acaban sucumbiendo ante la falta de seguridad.
El último ha sido Instawallet, donde han desaparecido Bitcoins por valor de más de 300.000 dólares; pero no es el único caso de webs o de usuarios, como Allinvain al que robaron 25.000 Bitcoins en 2011. A 100 dólares por Bitcoin, hoy esa cartera valdría 2.5 millones de dólares.
Y luego están los nuevos troyanos que infectan ordenadores para hacer minería de bitcoins… porque Bitcoin no está diseñado para ser un sistema equitativo, cuanto mayor sea la potencia de cálculo que tengas a tu disposición, más Bitcoins nuevas conseguirás según el algoritmo las vaya liberando.
La minería comenzó usando las CPU de los ordenadores, luego pasó por las GPU de las tarjetas gráficas, que son más rápidas para tareas específicas como esta, llegaron a los dispositivos dedicados FPGA, para estar actualmente en la minería de super computadores ASIC, con mucho más poder de cálculo a bajo precio y consumo.
Así hay un usuario que está consiguiendo a diario más de 120 bitcoins, más de 12.000 dólares diarios al precio de cambio de hoy, gracias a disponer de máquinas Avalon ASIC.
Los que hayan optado por las ASIC de BitForce deben de estar tirándose de los pelos, desde Octubre de 2012 esperando por las máquinas que reservaron y pagaron, que ahora han aumentado de precio y bajado de velocidad de cálculo… y siguen sin ser entregadas.
Según aumente la base de máquinas ASIC y vaya bajando el número de Bitcoin nuevas en la cadena hasta llegar a cero en 2140, la competencia va a ser cada vez más dura y económicamente no viable.
Posiblemente el futuro sea de sistemas como Bitcoin, pero de momento no pasa de ser un experimento que es el sueño húmedo de muchos liberales, mover dinero sin que el gobierno pueda controlarlo (aunque ya lo estén intentando), especulación fácil, anónimo… llama la atención que unos de los grandes poseedores de Bitcoins sean los hermanos Winklevoss, que seguramente los conoceréis mejor por su continua batalla legal con Mark Zuckerberg por Facebook y el robo o no de la idea original sobre la que se montó esta red social.
A nada que rebusquéis un poco encontraréis más fondos de inversión de capital riesgo que están metiendo un pie en este submundo financiero que está creciendo en la red.
Mientras tanto, Bitcoin no pasa de ser una estampita digital, un sitio inestable y peligroso donde invertir dinero por miedo a un corralito financiero, a los bancos o porque pensamos que es una buena inversión… y de inversiones que dan un buen interés y luego son una burbuja, sabemos bastante en España.