Liberando código fuente: Hoy la web de Esquiroles

Alguno ya conocéis la web que monté a toda velocidad para la huelga general del pasado 14 de Noviembre de 2012, http://esquiroles.soydelbierzo.com

Hoy he decidido compartir con la comunidad el código fuente de dicha página por si a alguien le parece interesante y le apetece crear cualquier tipo de servicio útil basado en mapas.

El código fuente lo podéis encontrar en:

https://github.com/soydelbierzo/esquiroles

Si tenéis dudas, ruegos o preguntas, dejadlas en los comentarios de esta página:

/codigo-fuente/esquiroles/

Que los disfrutéis.

Manifiesto de la Guerrilla Open Access, en memoria de Aaron Swartz

Hoy amanecimos con la noticia del suicidio de Aaron Swartz, un desconocido para el gran público; un informático, un hacker para muchos que conocíamos su trayectoria.

Coautor del formato RSS (el que usamos para leer noticias con Google Reader, compartir noticias de nuestros blogs, etc) con tan solo 14 años, fue uno de los miembros más jóvenes de la W3C, el consorcio internacional que se encarga de definir el funcionamiento y el futuro de la Web.

Otros conocen a Aaron como uno de los fundadores de Reddit.

Otros muchos le recordaremos por su faceta de activista en la red.

En julio de 2011 fue acusado por la oficina del Fiscal General de los EE.UU por descargarse demasiados artículos científicos de JSTOR empleando la red del MIT, lo cual podría haberle supuesto una condena de hasta 35 años de prisión… no es el único, Greg Maxwell también ha puesto a disposición del público otros documentos que son de pago.

Aaron tenía 26 años y decidió que no quería pasar prácticamente el resto de su vida encerrado, se quitó la vida dejando un importante legado, quisiera destacar el Guerilla Open Access Manifesto, fechado en Julio de 2008:

La información es poder. Pero como todo poder, hay quienes quieren mantenerlo para ellos mismos. La herencia científica y cultural del mundo entero, publicada durante siglos en libros y revistas, está siendo digitalizada y bloqueado su acceso por un puñado de empresas privadas. ¿Quieres leer los documentos que muestran los resultados más famosos de la ciencia? Deberás enviar grandes cantidades [de dinero] a editoriales como Reed Elsevier.

Están aquellos que luchan para cambiar esta situación. El Movimiento Open Access ha luchado valientemente para garantizar que los científicos no pierdan sus derechos de autor, sino que, en vez de eso, asegurar que su trabajo sea publicado en internet, bajo términos que permiten el acceso a todo el mundo. Pero, incluso en el mejor de los escenarios, esto solo se aplicará lo que publiquen en el futuro. Todo lo anterior a ahora se habrá perdido.

Eso es un precio muy alto a pagar. ¿Obligar a los investigadores a pagar para leer el trabajo de sus colegas? ¿Escanear bibliotecas enteras pero solo permitiendo que sea leído por el personal de Google? ¿Facilitar artículos científicos a aquellos que están en universidades de élite del Primer Mundo, pero no para los niños en el Cono Sur? Esto es escandaloso e inaceptable.

«Estoy de acuerdo», dicen muchos, «Pero… ¿Qué podemos hacer? Las empresas que tienen los derechos de autor generan una gran cantidad de dinero cobrando por el acceso, y es perfectamente legal – no hay nada que podamos hacer para detenerlos.» Pero hay algo que podemos hacer, algo que ya se está haciendo: podemos contraatacar.

Aquellos con acceso a esos recursos – estudiantes, bibliotecarios, científicos – se os ha concedido un privilegio. Tiene la oportunidad de alimentarte en este banquete de conocimiento, mientras el resto del mundo se queda fuera. Pero no necesitáis  – de hecho, moralmente, no debéis – mantener este privilegio para ustedes mismos. Tenéis el deber de compartirlo con el mundo. Tenéis: intercambiar contraseñas con colegas de profesión, realizar las peticiones de descarga de amigos

Mientras tanto, los que se han quedado fuera no están de brazos cruzados. Os habéis estado infiltrando por los agujeros y saltando vallas, liberando la información bloqueada y compartiéndola con amigos.

Pero toda esta acción sucede en el oscuro y oculto mundo «underground». Se le llama robo o piratería, como si compartir esta riqueza de conocimiento fuese el equivalente moral de saquear un barco y asesinar a su tripulación. Pero compartir no es inmoral – es un imperativo moral. Solo aquellos cegados por la codicia rehusarían dejar a un amigo hacerse una copia.

La grandes corporaciones, por supuesto, están cegadas por la codicia. Las leyes bajo las que operan así lo requieren – sus accionistas se rebelarían por ganar menos. Y los políticos a los que han sobornado, aprobando leyes que les conceden el poder exclusivo de decidir quien puede hacer copias.

No hay justicia en acatar leyes injustas. Es hora de salir a la luz y, en la gran tradición de la desobediencia civil, mostrar nuestra oposición a este robo privado de la cultura pública.

Debemos obtener la información, donde quiera que esté almacenada, hacer nuestras copias y compartirla con el mundo. Debemos recopilar material que no tenga derechos de autor y añadirlo al archivo. Debemos comprar bases de datos secretas y colgarlas en la Web. Debemos descargarnos publicaciones científicas y subirlas a las redes de intercambio de archivos. Debemos luchar por la Guerrilla Open Access.

Si somos los suficientes, alrededor del mundo, no solo vamos a mandar un fuerte mensaje de oposición a la privatización del conocimiento – vamos a convertirlo en algo del pasado. ¿Te nos unes?

Aaron Swartz

Julio 2008, Eremo, Italia

Han cerrado #megaupload, volvamos al P2P – Guía para Novatos

Menudo drama, han cerrado Megaupload y el resto de servicios similares están borrando como poseídos cualquier material que pueda llevar al FBI a tocarles las narices.

Quitando el detalle de que los que pagamos por el servicio Premium nos hemos quedado con la misma cara que las vacas cuando ven pasar los trenes, no es el fin del mundo de las descargas, que recordemos por enésima vez, son legales en España y no es piratería por mucho que los mass media mientan sobre ello a diario.

Si como yo, antes de esta época de descargas directas y streaming on-line vienes del mundo del P2P, fin del post, ya sabes lo que tienes que hacer, creo que no te voy a enseñar nada nuevo, si no sabes muy bien de lo que hablo, te lo cuento a continuación.

El P2P es el intercambio de archivos entre pares, entre usuarios, no hay servidores como en el caso de Megaupload que sirvan estos archivos… a grandes rasgos, el FBI lo tiene bastante complicado para detener este modo de intercambio, y se le puede complicar más aun, al final os digo como.

¿Que necesitas para empezar? Lo primero una aplicación, un cliente de BitTorrent, personalmente te recomiendo uTorrent, ahora verás porqué.

Para descargártelo entra en http://www.utorrent.com y descárgate la versión para tu sistema operativo, Windows, Mac o Linux.

Una vez instalado y ejecutado, en el menú Opciones -> Preferencias podremos configurar a placer donde queremos que uTorrent descargue los archivos, carpetas que queremos compartir, si queremos limitar el ancho de banda que consume el programa (para no saturar nuestra ADSL/Fibra Óptica/etc), etc, etc, etc. Ahí os dejo que juguéis vosotros con las opciones, mucho cuidadito con compartir una disco duro entero, cualquiera podría tener acceso a archivos sensibles,  mejor crearle una carpeta para él solo donde descargar y compartir otros archivos voluntariamente.

¿De donde saco los torrents para empezar a descargarme cosas?

Pues hay muchos sitios y muy variados, algunos te piden que te registres, otros tienen complicados sistemas de regístrate -> vete al foro -> descarga el enlace -> vuélvete loco -> Aquí tienes el torrent.

Mis favoritos, por sencillez, por no necesitar registro la mayoría son:

EliteTorrent.net

No requiere registro, te bajas el torrent lo abres en uTorrent y a descargar.

 

TorrentSpain.com

Aquí te tienes que registrar usando una cuenta de www.perfilunico.com, es sencillo y gratuito.

Hay más de este estilo, si buscas «torrents» en Google encontrarás un montón, en todos ellos puedes encontrar películas, series, música.

Por otro lado tenemos los buscadores puros y duros, uno que seguro que os suena es www.thepiratebay.org, pero hay más.

Foofind.com

Permite la búsqueda de torrents, descargas directas y acotar por música, vídeo, programas y unas cuantas opciones más, está creado por Pablo Soto, aquel al que las discográficas demandaron con nulo éxito y a quien el gobierno ha dado una jugosa subvención por considerar que su potencial es beneficioso para el país.

 

Google.es

Si, no es un error, Google dispone de opciones en las búsquedas que lo convierten en un lugar ideal para encontrar torrents para descargar con nuestro cliente uTorrent.

Para ello tan solo hace falta que en la búsqueda añadas «filetype:torrent», por ejemplo: «filetype:torrent sherlock» nos mostrará resultados de webs que tienen un torrent relacionado con sherlock, como todo, podemos refinar la búsqueda para que los resultados sean más precisos.

 

Finalmente, si queréis poder compartir con amigos una máquina en la que descargar torrents podéis ir a Opciones -> Preferencias de uTorrent y activar la opción Remote.

Esta os pedirá un nombre de máquina y una clave que podréis compartir con vuestros amigos.

 

Con esta opción activada, podrás controlar de manera remota (desde el trabajo, desde el smartphone o la tablet) tu uTorrent para enviarle descargas, a la vez que podrás descargarte en remoto los archivos que ya haya descargado uTorrent.

Para acceder al Remote, tan solo hay que entrar en la siguiente web:

http://remote.utorrent.com

Lo primero que nos pedirá es que movamos el ratón o el dedo por la pantalla del smartphone/tablet, es por un tema de generar números aleatorios y así incrementar la seguridad de la comunicación.

Acto seguido nos pedirá los datos que hemos configurado en el uTorrent, es decir, el nombre que le hemos asignado a la máquina y la clave que le hemos puesto.

Con esto, el servicio será capaz de conectarse con el ordenador en el que tienes instalado y ejecutándose uTorrent, y a través del interfaz web podrás descargarte los archivos al ordenador en el que estés, o a tu móvil, añadir nuevos torrents (cargando el archivo .torrent o poniendo la URL para que uTorrent se descargue el archivo) para que se los vaya descargando en lo que tú llegas a casa, etc.

Para Android hay una aplicación nativa de uTorrent Remote en el Market.

Desde un iPad la interfaz de la web será un poco distinta, y solo te permitirá añadir torrents insertando la URL desde la que se puede descargar el torrent.

Esos datos de acceso a Remote los puedes compartir con tus amigos para que puedan ordenarle a tu torrent que haga nuevas descargas y luego compartirlas con ellos, bien sea descargándoselas desde esta web directamente o que se la copies en un disco usb.

¿Esto es seguro? Bastante, pero puedes incrementar la seguridad encriptando las comunicaciones, si quieres hasta el extremo usando Tor Project, pero esto ya es material para otro post que haré un día de estos…